Monday, September 12, 2005

Un bello recuerdo....

Nos habiamos citado a las 9:15 de la noche del viernes.... enfrente de la catedral.
La noche estaba extrañamente calmada.

Caminando a paso rápido y siendo las 9:12 de la noche.... comenzaron a caer las primeras gotas lluvia.
Apresuré aun mas el paso.
Como una visión angelical la encontré......
Estaba de espaldas, viendo con curiosidad la parte alta de la catedral.
Su hermoso cabello largo y rizado jugueteaba con el poco viento que hacia esa noche.....
La lluvia comenzaba a tomar mas fuerza.
La tomé de la mano sin avisar y ella volteó sin sorpresa alguna.
Me miro fijamente a los ojos y de sus tiernos y húmedos labios salieron las palabras .....
-A donde nos vamos......
-A mi casa, le respondí.

Mi casa no estaba muy lejos de la catedral, por lo que decidimos irnos caminando..... La lluvia empeoraba cada vez mas.
Comenzamos a correr como locos tomados de la mano y avanzamos cuanto pudimos hasta que la lluvia intensa no nos dejó avanzar.
Con mi cuerpo intente protegerla de la lluvia y la abrazé fuertemente hacia mi, al mismo instante que le decía al oido las palabras ... Te amo.....
Seguimos corriendo.

Al llegar a la vacía casa nos dimos cuenta de lo empapados que estabamos, ella dijo con tristeza que su maquillaje se habia estropeado por completo; y asi era.
Al ver su rostro desnudo, sin una gota de maquillaje, pude observar que bajo esas plastas de pintura y maquillaje, se encontraba todavia el rostro de una niña..... 17 años.

Con sutileza me acerque hacia ella y sin incomodarla le susurré al oido.....
-Eres muy hermosa....

No mentía; realmente se veia muy hermosa, con su cuerpo y su rostro mojado, parecía una gatita indefensa.

Prendí la luces de la casa y nos sentamos en los sillones de la sala.
Prendí el estereo y puse cds de Joan Sebastian; posteriormente saqué una botella de tequila, unas latas de cerveza, unos refrescos y limones. El tequila era para ella, las cervezas para mi.
Ella inocentemente preguntó:
- y los vasos?????

Que estupido habia sido, tenia todo lo que podia haber necesitado para esa noche, pero olvide comprar los vasos.
De mi escapó una sonrisa nerviosa, y confesé haberme olvidado de los vasos. Que tonto soy.

Me tomé una cerveza a la carrera, y cuando la hube vaciado, se la entregué a ella, para que se sirviera en la lata.
Y eso hizo al momento.
Yo encendí un cigarro (marlboro) y lo fume con notable placer. Ella saco un paquete de cigarros (benson) y se sacó uno, yo se lo encendí.

Pasaron unas 2 horas, que para mi se me hicieron como media hora.
Ya no estabamos tan mojados, nuestro pelo casi se habia secado por completo.
Hablamos de mil cosas y de nada a la vez; mostré mi lado mas fuerte y hermoso, pero tambien mostré el mas debil. Ella siempre se mantuvo al margen de todo.

Sentada ella sobre el sillon, yo me acerque y me sente en el piso, a un lado de ella; recargandome sobre sus piernas. Su falda negra se subió un poco, casi nada.
Poco a poco y casi rozando su piel, meti mi mano po debajo de su falda y, mirandola fijamente a los ojos , acerqué mis labios a los suyos para darle un beso suave y tierno. Nuestros labios apenas se rozaron.

Inmediatamente saque mi mano de abajo de su falda para tomar mi cerveza. Le di un trago largo y profundo.
Al momento de dejar la lata de cerveza en una mesita, ella con su mano me tomó de la cara y acerco sus labios a los mios para darnos un largo y húmedo beso; de esos que te dejan sin aliento.
Con ternura y delicadeza abri suavemente sus piernas y me metí en medio de ellas, yo arrodillado en el piso y ella sentada en el sillon, comencé a besar sus tiernos labios, su cara.
Fui bajando poco a poco para besar su cuello, morderlo un poco e ir bajando poco a poco hasta llegar a sus senos. En ese momento ella me aparto.

Yo sonreí y, con firmeza coloqué mis dos manos encima de sus piernas y poco a poco fui subiendo su falda hasta dejar al descubierto su ropa interior, sus pantys.
Con firmeza pero siempre gentil, jale sus piernas hacia mi para estar en posición de hacer el amor, pero aun estamos los dos vestidos.
Desabotoné su blusa y deje sus pechos al descubierto.
Con ternura, y casi rozando su piel, acariciaba con mi lengua sus hermosos senos; primero con suavidad y luego con un poco mas de fuerza, hasta casi chuparlos y en ese momento ella me volvió a apartar con mas fuerza que casi caigo, ella se avalanzó sobre mi y con la fuerza de su peso me tiro al suelo; y estando encima de mi, comenzó a besarme en la boca y en el cuello.
Ella no era suave ni tierna, me besaba y me abrazaba con furia, con coraje.
De repente comenzó a morderme, primero suave y luego con tanta fuerza que me hacia gemir de dolor.
Ahora fui yo el que la apartó.
Estando yo acostado en el frio y duro piso; y estando ella arriba de mi, por un momento nos quedamos mirandonos, fijamente a los ojos.
El tiempo se detuvo como por 30 segundos y entró esa vieja sensación de que todo era un sueño. El ambiente borroso, el sentir pesado el cuerpo, el escuchar la musica con eco.
De mi posición acostada, me senté y la bese con pasión en la boca, la voltee y ahora era yo quien estaba arriba.
Descubrí nuevamente su pecho para dejarlo completamente desnudo, tome una cerveza y le di un tremendo sorbo. Sin tomarme todo el sorbo, besé y derrame un poco de cerveza sobre sus senos desnudos y comencé a besarlos.
Ella extasiada al sentir el frío de la cerveza, gimió de placer y me arrancó la camisa a tirones. No hubo momento de desabotonar mi camisa.
Metí mi mano en su parte mas intima y empecé a acariciar suavecito su intimidad.
Ella hizo lo mismo pero con fuerza.
De pronto nos detuvimos.
La musica habia dejado de sonar hacia ya un buen rato.
Ella me pidió que pusiera mas música a lo que yo accedí de mala manera.
Programé el estereo para que tocara hasta las12 de la tarde del dia siguiente y volvi con ella.....
Mi sorpresa fue muy grande cuando la encontre muy arreglada vestida y sentada muy correctamente en el sillon.
Tomé mi cerveza y me sente en el otro sillon.
Comenzamos a platicar de cualquier tonteria pero ambos teniamos la respiración bastante agitada. Aunque se habia cortado la inspiración el fuego no estaba totalmente apagado.
Me levante del sillon, la tome de la mano e hice que se levantara. Seguí besandola y la jalaba para que me acompañara a la habitación mas próxima.
Ella no quería, se resistia, por lo que me veía en la necesidad de ponerla contra la pared y besarla y tocarla apasionadamente.
A medida que nos acercabamos a la habitación, la luz se iba alejando, por lo que nos ibamos quedando poco a poco a obscuras.....

0 Comments:

Post a Comment

<< Home